Fatalidad y tragedia con el fallecimiento de Juan Pablo Montes de Oca, pero también mensajes de unidad, fraternidad, y resurrección.
La noticia fue impactante, porque arrastraba fatalidad y tragedia, el fallecimiento de Juan Pablo Montes de Oca y su familia estremecía a muchos, y hasta difícil de creer su intempestiva partida, un accidente aéreo convertido en desgracia que sacudió a Chiapas, que aún se encuentra con tristeza y dolor, porque se trataba de un personaje público que había venido trascendiendo en el quehacer político, como alcalde, diputado local y diputado federal, sin embargo había llegado a la cúspide dentro de un proceso electoral actual con mucha intensidad, que se vive- en nuestro país y evidentemente en Chiapas, donde floreció la leyenda de Montes de Oca, de un actor político de sobrada sensibilidad y enorme potencial político para bordar sobre un futuro de una nueva era en Chiapas, y que resplandece más aun con la entrega y la pasión de la gente: La Jaguarmanía.
Juan Pablo Montes de Oca, fue un chiapaneco que labró un camino de estrategias y habilidades extraordinarias de lo que venía, entendió perfectamente el trabajo político de su amigo y hermano Eduardo Ramírez Aguilar, que juntos lograron dejar una semilla y un origen de política fraterna, unida y fusionada donde “Chiapas será uno solo”, y que muchos afortunadamente entendieron la enseñanza de que camine fraternalmente el pueblo chiapaneco. JP Montes de Oca Avendaño, supo tejer fino y dejó amarrado un compendio de tácticas, condiciones y muchas oportunidades para pensar en la enorme riqueza de Chiapas, y que hay que despertarlo en su desarrollo nacional, a sus 200 años de mexicanidad.
Su trabajo de Juan Pablo Montes de Oca, fue impresionante, supo establecer con sabiduría política una campaña bien diseñada y trazada y logró convencer que es lo que se pretende, y a tres días de inicio de campaña oficial estatal, Dios se lo lleva a su entorno celestial a él y a su familia. Más allá de su grata forma de hacer política sensible, de atributos positivos que siempre aumentaron su perfil de “suma política”, leal al discurso de Eduardo Ramírez, el fraterno Montes de Oca, nos deja un legado de que el componente correcto de la unidad y la cohesión social es lo mejor para fomentar una nueva clase política para nuestra gente en la entidad.
Se fue un gran chiapaneco que en los últimos meses supo entrelazar la amistad y el afecto con todos y para todos, un fenómeno que deja huella y que no se había visto en la “operación política”; hubo mucho llanto, y asombró por todo lo que aconteció en “la fatalidad aérea” y en la adversidad del destino, que solamente Dios sabe porque suceden este tipo de escenarios, que lo único que nos debe dejar es que el mejor ejemplo de un cambio social en busca de un desarrollo nacional para Chiapas y sus nuevas generaciones, es la unidad de su gente que se observa como un fenómeno inédito que arrastra la Jaguarmanía de Eduardo Ramírez y su legado también de conocimiento político en los más altos niveles del concierto nacional, que garantiza un emprendedor desarrollo de Chiapas que es lo que ansiamos. La partida de JP Montes de Oca, nos deja imborrables huellas de que Chiapas, debemos seguir en esa ruta de la fraternidad para el gran salto del jaguar el 2 de junio, con la participación ciudadana entregada mostrando que Chiapas ya le urge ser la entidad del cambio nacional. Ya lo merecemos y esta es la gran oportunidad. Ayer domingo de pascua, domingo de resurrección e inicio de campaña de la Jaguarmanía.
Con Eduardo Ramírez Aguilar, Chiapas va a cambiar: Montes de Oca.
El pasado 6 de marzo, en una primera entrevista (de tres que dio a los medios locales) desde la Torre digital del Diario de Chiapas, se tuvo como invitado especial a Juan Pablo Montes de Oca, quien habló sobre la preparación de la campaña de Eduardo Ramírez Aguilar, precandidato único por Morena a la gubernatura del estado de Chiapas, para encarar las próximas elecciones de 2024. Dijo en esa ocasión que, apenas el pasado 10 de febrero del presente año, terminó el proceso de la precampaña y así comenzar con los preparativos de la campaña en la logística, el equipo y así recorrer varios municipios de la entidad a lo largo de dos meses.
“A partir del 31 de marzo, se dará inicio de la campaña electoral de Eduardo Ramírez Aguilar y así poder encarar las elecciones del 2 de junio. Estamos muy optimistas de todo porque se ha visto un proceso electoral maduro e increíble, principalmente por su trayectoria importante que tuvo Eduardo Ramírez Aguilar en el senado”, acotó.
Aclaró que, con ERA, no existe ningún sentimiento de revancha o de venganza y se pretende crear una nueva clase política en donde se acabe el señalamiento y entre otros factores que desintegren la unidad del estado. “Con Eduardo Ramírez Aguilar, las cosas van a cambiar en Chiapas porque hace un llamado a todas las personas que participen y en donde, todos tienen la puerta abierta para sumar y hacer un Chiapas más próspero y de unidad”, apuntó.
Destacó que, se logró consolidar la gran coalición de tres partidos nacionales y cuatro locales; más allá de los partidos, en donde se tiene la gran alianza es con la gente ya que, todos caben dentro, aunque sean de otra ideología. “Gracias a ERA, se ha visto un fenómeno muy distinto porque se ve que, en Chiapas, hay mayor unidad y comunicación con la gente. Se trata de que el pueblo de la entidad, otorgue votos para que exista un mejor proceso electoral y así hacer cosas mejores para el bienestar del estado” finalizó Juan Pablo Montes de Oca.
“Hoy me deja un hermano en la víspera mas anhelada de ambos, pero estará conmigo en cada triunfo y adversidad, como siempre estuvo: ERA
Después de conocerse la tragedia aérea el candidato al gobierno de Chiapas, Eduardo Ramírez “El Jaguar Negro” escribió en su perfil digital: “Es para mi muy difícil esta noticia que es un duro golpe en mi vida y en la de muchos chiapanecos. Saber que un hombre que caminó conmigo por muchos años en los que soñamos juntos un mejor Chiapas, hoy parte hacia otros caminos celestiales, me deja con un vacío y dolor de hermanos irremplazables. Juan Pablo Montes de Oca y su familia lamentablemente hoy nos dejan. Estoy atónito ante esta noticia. Pero sé que los sueños que construimos juntos permanecen y se volverán realidad en honor a su vida y al legado en nuestros corazones y en el del pueblo de Chiapa”, y agregó: .
“J. P., cómo le decíamos con cariño, fue más que un hermano para mí. Siempre estuvo conmigo en cada paso, acompañándome en las alegrías y en las tristezas, como deben ser los hombres de verdad, cabales e íntegros en sus convicciones. Hoy me deja un hermano en la víspera más anhelada por ambos. Pero estará conmigo en cada triunfo y cada adversidad como siempre lo estuvo. Envío mis más sensibles condolencias hacia la familia Montes de Oca. Descansa en paz mi querido Juan Pablo”.
Una Semana Santa triste, pero también un domingo santo de resurrección el de ayer, que festeja el regreso a la vida de Jesús, el hijo de Dios, quien después del martirio vivido en la crucifixión regresa de entre los muertos como lo había prometido cumpliendo así con el mandato divino de su padre y probando que era el salvador de la humanidad. La vida en Chiapas tendrá que seguir con resurrección.